Recrearnos en la historia es volver a vivir lo acontecido. En
esta Bajada de la Virgen de Las Nieves 2015 disfrutamos de un número cultural jamás
visto, ni pensado en la mente de los ciudadanos de a pie, aunque realmente se gestó
hace años y desde entonces se ha venido preparando meticulosamente. Su andadura
empezó en el 2010 con su presentación oficial en la Casa Palacio del Conde de
Salazar, por medio de exposición y actos propios, el 21 de junio de 2011. Ha
sido todo un éxito su puesta en escena sus varias actividades en distintos
momentos del programa elaborado para esta ocasión quinquenal. Los ánimos no
decaigan y se superen los deseos de mejorar y participar en el futuro, porque
así se afianza nuestras raíces y se hace memoria de lo pasado honrando a
quienes nos han precedido en el tiempo.
Constituyen una Guarnición del XVIII, unidad creada a finales
del XVII con el objetivo de custodiar el Real Castillo de Santa Catalina e
instruir al resto de los artilleros milicianos. Atendiendo a sus inquietudes y
principios marcados en sus estatutos fundacionales y sensibilizados con las
edificaciones militares defensivas, que aún quedan en la ciudad, desaparecidas recientemente
por desuso o extensión urbana, no cabe la menor duda, que trata en rescatar un
patrimonio en parte olvidado para conservarlo en el disfrute de los ciudadanos
y visitantes ocasionales, reflejo tangible de lo que somos herederos.
Sus inicios fueron en diciembre de 2012 con doce componentes,
tal como sucedió en su día con la original Guarnición Real de Artillería de La
Palma, conocida popularmente como señala el encabezado del presente trabajo,
terminando constituida con 130 efectivos y esos deben ser los participantes que
pretende reunir en sus filas.
Comprender los hechos acaecidos es adentrarnos en lo esencial
de un pueblo, que ha evolucionado a través del tiempo y nos presenta una cara
nueva con sentimientos y con un corazón latiendo al son de cientos de
dificultades más o menos favorables o no.
Su actuación pública fue un gran acontecimiento de emotividad
y belleza. Aquel sábado, 27 de junio, durante las fiestas lustrales y a media
mañana, partiendo de las inmediaciones del Barco de la Virgen hasta el Real
Convento de la Inmaculada Concepción, franciscano, Museo Insular, y desde allí,
por las calles Baltasar Martín y Anselmo Pérez de Brito, llegaron hasta la
fachada renacentista del Excmo. Ayuntamiento y sus aledaños, en plena plaza de
España, para conmemorar el 272ª aniversario de la defensa de la ciudad por los
aludidos soldados y las Milicias de esta Isla.
Hacemos mención al hecho ocurrido, junio de 1743, con las
incursiones de corsarios y piratas a Santa Cruz de La Palma bajo la tutela de
reyes y gobernantes, sobre todo, franceses, ingleses y otros, cuando se
presentó ante el frente marítimo una pequeña escuadra de la Royal Navy a las
órdenes del capitán Charles Windham. En esta ocasión actual fue motivo del
hecho indicado en el párrafo anterior. En él se trajo al conocimiento del
amante del culto e inaudito ilustrado la presencia en ese entonces del
Gobernador de Armas el Coronel Nicolás Massieu.
Sería injusto finalizar sin ofrecer el listado de los integrantes
del grupo, indicando su cometido en el mismo: Manuel Hernández (capitán),
Domingo Santos (alférez), Andrés Sánchez (sargento), Julio Pérez (cabo), Jaime
Felipe (cabo), Ernesto Méndez (soldado), Domingo José Cabrera (soldado), Luis
Rodríguez (soldado), Marcelo Castro (soldado), Ángel Sáenz (soldado), Juan
Jesús Pérez (soldado), Aitor Montesinos (tambor) y Elías Sáenz (pífano).
No hay comentarios:
Publicar un comentario