Los Cancajos. Breña Baja |
El mundo visual de las pirámides de piedras en La Palma es
todo un misterio, que se extiende en otras islas, constituyendo un conjunto
específico en el marco del patrimonio local, etnográfico y esotérico. El
interés de las mismas no se basa en el matemático, sino en su propia
existencia. El suelo isleño alberga muchas de ellas dispersas en distintos
puntos, cuyo origen se desconoce y se integran en el paisaje. En algunos casos
se consideran cúmulos de material pétreo sin ningún valor añadido y de escasa
atención.
No sé cuando, no importa la fecha, un amigo y compañero de
profesión me comentó que no podía hacer ninguna transacción de una propiedad
suya por tener en su contorno una de esas construcciones. Sostenía la creencia
de ser consecuencia de cultivar viña y el acceso se orientaba de espalda al
sol.
Plano. Dibujo |
Las conjeturas son variadas desde un posible observatorio
astronómico (solsticios de invierno y verano y equinoccios de primavera y
otoño), con un uso práctico para calcular los ciclos naturales y rituales
religiosos hasta su utilización como ara de sacrificio de los aborígenes,
guanches o prehispánicos o iniciativa como recurso de aprovechamiento. Lo
cierto es que no se ha podido determinar su edad exacta ni, tampoco, su
vinculación con la masonería por ser símbolos principales de esta orden.
Acceso. Detalle |
Tan solo mirarlas se podrá comprobar una acumulación de
sobrantes con pequeñas rampas, que en algunas de ellas por el paso del tiempo
se han deteriorado y el escaso mantenimiento. La opinión más generalizada
atribuye a una técnica utilizada en agricultura para preparar los terrenos con
cultivos de temporada, según el modelo social de subsistencia.
La falta y la variedad
de posturas nos llevan a un compás de espera, constituyendo un misterio. Los
interrogantes surgen sobre la función de calendario o relojes astronómicos para
calcular las estaciones, simple meteorología o en beneficio de algunas
plantas.
Alineación en la Tierra. Banda roja |
Las hay en los municipios de Breña Baja (Los Cancajos), de la
que existe constancia de datos históricos, Los Llanos de Aridane, El Paso y la Polvasera (Breña Alta) con distintas
orientaciones geográficas y altitudes topográficas. Un estudio de su situación,
función, origen, razón estructural y datación con métodos fiables parece ser
que se alinean con otras en una estrecha banda con respecto al Trópico de
Cáncer.
Aparecen los majanos en las islas y, por lo tanto, no pasan
desapercibidos, agrupados en dos edificios o solos. Más de ochenta están
relacionados con cultos de fertilidad y fecundidad. Se han encontrado en los
bordes de la Caldera de Taburiente y Garafía: 17 yacimientos en el Lomo de Las
Lajitas y 8 en el Llano de las Ánimas. Son montones de planta circular, oval,
rectangular y cuadrangular sin ofrecer nada importante, sino depósitos de
residuos de deshechos, cuya medición oscila entre 1,5 y poco más de 4 metros.
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