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domingo, 19 de diciembre de 2021

SANTA CRUZ DE LA PALMA: RINCONES CON NOMBRE (XXI)

                              MIRADOR DE CALCINAS: ¿Cómo llegar al mirador? Es muy fácil ascender desde el puerto de Santa Cruz de La Palma por la LP-202, conocida por la carretera de Timibúcar, en su primer tramo, o de La Concepción. A poco de iniciar el ascenso nos hallamos una bella escultura titulada “Natura”, cuya autora es Pilar Gutiérrez Salamanca, “PeGé”, con una perspectiva de libertad y con vista al mar, desafiando a la lejanía.

domingo, 12 de diciembre de 2021

SANTA CRUZ DE LA PALMA: RINCONES CON NOMBRE (XX)

                              PLAZA DE LAS NIEVES: Ha sido testigo de los principales actos del programa parroquial del Santuario y de grandes citas marianas: la fiesta del 5 de agosto, con llegada y romeros procedentes de todos los puntos de la isla, conciertos y procesión de la Virgen alrededor del templo y las congregaciones con ocasión de la bajada del trono, traslado y retorno de la sagrada imagen durante las Bajadas lustrales, Semana Santa, Navidad, Año Nuevo, Reyes y otros eventos ocasionales. La plaza pavimentada con callaos y guijarros, cuenta con una fuente de cantería, de pila o tanque circular, con pilar para el surtidor, en el punto de intercesión de dos diagonales, que es el centro de la misma. El silencio que rezuma, interrumpido por la música del agua al caer como perlas y por el arribo intermitente de devotos y turistas, la sombra de las jaracandas, los magnolios y las araucarias, el entorno paisajístico del pinar y la arquitectura circundante como la casa rectoral y la de los romeros, la iglesia u otras construcciones convierten a este rincón tan enigmático en uno de los lugares más encantadores de La Palma.

domingo, 5 de diciembre de 2021

SANTA CRUZ DE LA PALMA: RINCONES CON NOMBRE (XIX)

                              PLAZA DE SAN VICENTE: La esperanza nos conduce a la hermosura de un lugar agreste envuelto entre montañas y barrancos, entre sonidos de brisas y cánticos de pájaros revoleteando en la espesa fronda de la arboleda circundante. Epítetos que se convierten en armónicos pentagramas de amor celestial y alegría, son dones que Dios ha puesto en el regazo familiar para disfrute de todos, como santa bendición. La simple melodía angelical cambia en sonrisas contagiosas, que irrumpen en emoción y, siempre, son bellos lenguajes de reencuentros al compás de los luceros.