Dispuestos a celebrar la Navidad
con todo el cariño del mundo y con la alegría más grande que nuestras almas pueden darnos en
manifestaciones familiares y públicas, como son los actos solidarios,
villancicos e inauguraciones de nacimientos o belenes en las distintas casas de
culturas, asociaciones de vecinos y sociedades culturales de diferentes
índoles, distribuidas por los muchos barrios. Luces y guirnaldas
adornan lo insospechado en un rincón con encanto, atrayente y rico en arte.
Detrás de todo eso hay verdaderos maestros, artistas plásticos, y sacrificados
quijotes amantes de lo tradicional.