Descubrir los bellos suelos con baldosas o losetas hidráulicas
alicatadas con esmero y precisión es un arte de gran calado y prestigio, siendo
un deleite para los sentidos y conocimiento del pasado de los isleños y al buen
gusto en el mundillo estilístico de la decoración de viviendas. Tanto en el
interior o exterior nos puede enamorar su presencia por el conjunto en sí y
porque se conjuga un compendio de historia, piezas únicas y multicolor.