fecha

 

domingo, 21 de julio de 2024

FIEL SERVIDOR DE DIOS Y DE LA IGLESIA

          ‘Ha partido a la Casa del Padre el sacerdote Juan López’. ‘Buenas tardes -José Francisco Concepción Checa, Padre Checa- lamento comunicarle que ha fallecido don Juan López, párroco de Nuestra Señora de La Encarnación de esta ciudad. Les pido que lo encomendemos en la oración […]. DEP’.

                              Estas son las palabras que me encontré en mi móvil el miércoles, 26 de junio, que acepté con resignación y con profunda pena, aparte de sorpresa, me sentí completamente abatido como cristiano y amigo desde hace años. Se fue un gran amigo, un enamorado de los designios de Dios al amparo de su misericordia, amor y obediencia. Luchó en silencio por la construcción de un Reino mejor, en el que solo hubiera paz y armonía entre unos y otros sin distinción, odio, guerra, hambre… ni dolor, soledad y angustia.

                              Ha fallecido el sacerdote Juan López Hernández (1949-2024), natural de Fuencaliente, nacido el 24 de junio, cuando ocurría la erupción del volcán de San Juan. ‘Los que Dios quiera, son más que suficientes. En sus manos estamos… en las mejores, -con cierta satisfacción lo decía prediciendo su partida hacia la eternidad para siempre’.

             En medio de la tempestad de la vida, entre la sucesión de los avatares cotidianos, nos enseñas, Señor, a confiar en el Padre y tener una confianza grande y plena de que todo está bien, porque lo haces Tú pensando en mí. En medio de las olas de nuestro peregrinaje: ‘A ti suspiramos, gimiendo y llorando en este valle de lágrimas. Ea, pues, Señora, abogada nuestra, vuelve a nosotros esos tus ojos misericordiosos y después de este destierro muéstranos a Jesús, fruto bendito de tu vientre… Amén’.

                              Danos la seguridad y fortaleza de la fe y con la misma confianza, que nos acoges en tu seno, al igual que a Juan López, bendícenos, párroco en su última parroquia ya que fueron muchas en las que compartió con todos los feligreses su labor apostólica, conmigo lo hizo desde su primera, inmediatamente después de ser ordenado presbítero por el obispo Luis Franco Cascón (1903-1984).

                         Sus restos mortales reposan en el camposanto de Fuencaliente de La Palma, en donde, con la esperanza aguardan la Resurrección en la que creyó y esperó.

No hay comentarios:

Publicar un comentario