fecha

 

domingo, 5 de febrero de 2012

NIÑOS POR LA PAZ


                            Hermoso gesto protagonizado, el 1 de febrero, por los alumnos y alumnas de las escuelas unitarias del nordeste de La Palma en la calle O´Daly de Santa Cruz de La Palma. Fue un gran acontecimiento público a la vista de los viandantes, que contemplaban atónitos las obras plásticas expuestas en favor de la comunicación y la concordia entre los pueblos del mundo sin fronteras, armas, genocidio… y elogiaban la solidaridad de todos. 
                       El papel protagónico de los niños es fundamental para considerarlo como un nuevo actor social, capaz de participar en los asuntos que lo afectan. Sus votos por los Derechos, que dio origen al Mandato Ciudadano por la Vida, La Paz y la Libertad, sean los artífices de una convivencia mejor y pacífica en el planeta.
                             Existen dos mil razones para la Paz y para que la discriminación no sea homónima de la disgregación. La fraternidad se convierta en el fiel de la balanza que mida la auténtica justicia por una cultura de hermandad y no violencia. Hagamos mención del siguiente manifiesto:
              Respetar la vida y la dignidad de cada persona, sin discriminación ni prejuicios.
              Practicar la no violencia activa, rechazando la violencia en todas sus formas: Física, sexual, sicológica, económica y social, en particular hacia los más débiles y vulnerables, como los niños y los adolescentes.
              Compartir un tiempo y mis recursos materiales, cultivando la generosidad a fin de terminar con la exclusión, la injusticia y la opresión política y económica.
              Defender la libertad de expresión y la diversidad cultural, privilegiando siempre la escucha y el diálogo, sin ceder al fanatismo, ni a la maledicencia y el rechazo del prójimo.
              Promover un consumo responsable y un modo de desarrollo que tenga en cuenta la importancia de todas las formas de vida y el equilibrio de los recursos naturales del planeta.
              Contribuir al desarrollo de mi comunidad, propiciando la plena participación de las mujeres y el respeto de los principios democráticos, con el fin de crear juntos nuevas formas de solidaridad.
                             La atención a los derechos del hombre es prioritaria a los gobernantes e instituciones supranacionales. En el orbe contemporáneo, el respeto a esos principios forma la raíz de una misión estrechamente ligada a un fin y objetivos específicos, que deben de ser reclamados siempre y en todas partes. Se trata de un factor importante en el comportamiento y desarrollo socio cultural de las naciones.
                             Realmente, es triste concebir la idea de que, aún, subsisten miles de situaciones que representan una seria amenaza a la fraternidad, y en las que se hace caso omiso de los compromisos fundamentales del ser humano, el bien de todos se subordina a intereses particulares, el pobre es explotado por el rico, el débil por el fuerte, el inocente por quien carece de escrúpulos… y, además, los hombres son víctimas de la ciencia y de la tecnología, en lugar de ser los beneficiados del progreso y del desarrollo creados por el genio de ellos.
                             Resulta esencial poseer un espíritu global de comprensión y de conciencia con una visión muy amplia y distendida para acreditar que: “Cuando está amenazada la paz de uno, está en peligro la de todos, y no puede haber en este mundo si uno solo de los pueblos, aunque sea el más pequeño, es olvidado o excluido”.
                             No se embriaguen nuestros ayes con otros ayes. La sublime voz de la esperanza sea el propósito útil y pregonero de aniquilar el odio, la mentira y otros males en miles de seres inocentes para suplicar por el entendimiento entre los gobiernos.
                             Cuántas manos fatalmente aprietan el gatillo para asesinar a hermanos nuestros, bañando de rencor el pan de cada día, ahogando con migajas el llanto… Nuestro aliento se convierta en fértil canto, que rompa la cadena de la condena y de la cruel tortura, y que sea el umbral de un amanecer nuevo y resplandeciente.
                             Juan Pablo II (1920-2005): “No prevalezca la espiral del odio y la violencia, que no conducen a solucionar los problemas”. Y, Benedicto XVI (1927), en su primera y tradicional Misa de Nochebuena, el 25 de diciembre de 2005, en su homilía dice: “Cumple tu promesa Señor. Haz que donde hay discordia nazca la paz, que surja el amor donde reina el odio, que se haga luz donde dominan las tinieblas. Haz que seamos portadores de tu paz”.
                             La verdadera amistad entre las familias procede del auténtico fruto del amor y la esperanza de no escribir páginas de nuestra historia con letras de sangre. Y, que desde ahora en adelante, en este siglo y milenio se haga con la inteligencia y el corazón.
                                    Vamos a enviar palomas
                                 hacia todas las galaxias,
                                 desde el Roque en Garafía,
                                 nevadas de luna clara.

                                     Vamos a escribir palomas
                                 sin cuadernos, sin pizarras,
                                 que vayan de mano en mano
                                 con la PAZ entre las alas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario