AÑO DE BAJADA

                              Con todos los entresijos que surgen con un año de Bajada se respira un ambiente de fiesta. Con el concurso del cartel anunciador y las convocatorias para seleccionar los aspirantes a los diferentes números se daba comienzo a la edición de 2010. El cupón de la ONCE del próximo 31 de julio hará alusión a la misma coincidiendo con la estancia de la Virgen de Las Nieves en Santa Cruz de la Palma. “El hecho de que las fiestas lustrales aparezcan como motivo principal en el tradicional sorteo –consideró el alcalde, Juan Ramón Felipe San Antonio,- supone por un lado el reconocimiento a una fiesta de enorme calado y significación, con más de trescientos años de historia, y al mismo tiempo contribuye de manera indirecta a su difusión y promoción en toda España, por lo que hemos de felicitarnos por esta decisión”.

  

                              Por otro lado, la elección de la orquesta sinfónica de Las Palmas como formación orquestal titular, no es un hándicap porque desarrolla un protagonismo destacado en varios de los actos principales del programa: el minué, el carro alegórico y triunfal y la loa de recibimiento a la llegada de la Morenita al atrio de la Parroquia Matriz de El Salvador. Es esencial contar para esta labor con un conjunto que ofrezca suficientes garantías de calidad.

                              El baile de los enanos estrena letra y música y comienzan las estrofas: “Del mester de juglaría, guardamos la tradición…”. La composición “Los cantares del mester”, fue elegida por unanimidad entre los nueve trabajos que optaban al premio. Los componentes han sido sucesivamente caracterizados en la primera parte, antes de la transformación, como viejos, guerreros, peregrinos (única vez que se ha repetido), monjes blancos, reyes, japoneses, romanos, doctores, nazarenos, consejeros, estudiantes, taumaturgos, atenienses, dominicos, astrólogos, musulmanes, navegantes, vikingos, cardenales, caballeros y, en la presente, juglares.

          Punto y aparte fue la nueva danza coreada infantil incorporada, “Danza de las Sirenas”. Las voces blancas fueron un aliciente más en la línea de las anteriores: “Las Flores” (1930), “Copos de Nieve” (1935), “Margaritas” (1940) y “Danza de las Mariposas” (1895) y reestrenada en 1995, 2000 y 2005.