La profunda secularización promocionada por los gobiernos liberales de entonces y las propias consecuencias generadas por la guerra de la independencia, luchas carlistas y por la deuda pública, surgió la vasta desamortización eclesiástica que auspició Campoamor y Jovellanos y que, luego, desarrolló Mendizábal a partir de 1835-1837, culminándola Madoz en el bienio progresista de 1854-1856. Se ejecutó en el solar que ocupaba la plaza colateral a la iglesia del convento de monjas dominicas de Santa Catalina de Siena. En varias décadas se mantuvo inactivo, veintiún años, una vez adquirido a sus propietarios por el Excmo. Ayuntamiento capitalino. Fue un acierto respetar sus valores arquitectónicos, conservando su integridad original en el decorado, muchos de ellos en pésimo estado de conservación, reposición de detalles florales y arreglo de varias partes de los capiteles y del escudo central, aunque lamentamos la pérdida de otros elementos existentes en su interior con un estilo señorial, armónico y funcional.
Hagamos un
sencillo historial de cuánto se ha celebrado: teatro (zarzuelas, operetas),
cine, mítines políticos (Marcelino Camacho, Adolfo Suárez…), fiestas de arte,
veladas de magia, actuaciones de divos (Antonio Machín, Dúo Dinámico…), bailes,
peleas de gallos, recitales, conciertos, festivales escolares… Recordadas son
las calificaciones de “apta” o “no apta” a menores de edad para las películas
proyectadas en su pantalla. Fueron superproducciones norteamericanas,
mejicanas, hispano-francesas e italianas… y las nacionales, que no gozaban de
buena calidad. Son inolvidables las del oeste, romanos, aventura, coplas,
rancheras… Nombres de actores y actrices españoles como Carmen Sevilla, Luis
Mariano, Juanita Reina, José Isbert, Vicente Parra, Paquita Rico, Francisco
Rabal, Sara Montiel, Manolo Morán, Antonio Molina, Ana Mariscal, Lola Flores,
Luis Prendes, Antonio Ferrandis, Irene y Julia Gutiérrez Caba, Florinda Chico,
Lina Morgan, Gracita Morales… Mitos del celuloide americano: Marlon Brando,
Alan Ladd, Paul Newman, Marilyn Monroe, Robert De Niro, Errol Flynn, Tony
Curtis, Robert y Elizabeth Taylor, Clark Gable, Henry Fonda, Anthony Quinn,
John Wayne, Bette Davis, Burt Lancaster, Gary Cooper, Katharine Hepburn, Mel
Ferrer, Natalie Word, James Dean, Jerry Lewis, Glenn Ford, Cary Grand, Vivien
Lelgh, Olivia De Havilland, Kirk Douglas, James Mason, James Stewart, Stewart
Granger, Dean Martin, Montgomery Clift, Steve Moqueen, Charles Bronson, Gregory
Peck… Otros: Gina Lollobrigida, Marcello Mastroianni, Sofía Loren, Raf Vallone,
Claudia Cardinale, Jorge Negrete, Pedro Infante, Pedro Armendáriz… El extenso
etcétera se traducía en títulos como La Violetera, El último Cuplé, Dónde vas
Alfonso XII, Dónde vas triste de ti, Lo que el viento se llevó, El hijo de
nadie, Bienvenido Mr. Marshall, El Cid, Ford Apache, Rebelión en el fuerte, El
Padrino, La ley del silencio, Yo confieso, Vidas rebeldes, La heredera, Río
Rojo, De aquí a la eternidad, El baile de los malditos, Al este del Edén,
Scaramouche, Las minas del rey Salomón, 20000 leguas de viaje submarino,
Titanic, Los cañones de Navarone, Los doce del patíbulo, La gran evasión, Quo
Vadis… y las apetecibles de Tarzán, Charlot, Cantinflas, los hermanos Marx y
las del gordo y el flaco. Cerrando este capítulo citemos aquella estrofa
popular, refiriéndonos a los bailes del Carnaval, que imperaba en todas las
parrandas: A bailar, esta noche en el Circo te espero…
Embelesado en la
infancia y mocedad en tiempo del gallinero (General), tardes y noches,
disfrutando de la placidez del cinematógrafo mis sueños fueron singulares.
Sentí el calor de la belleza y de la historia, que entre sombras forjaban un
imperio de intensos logros.
Pronto se cumple
cuatro años de la reapertura, 25 de octubre de 2008, que nos llenó de alegría y
nos convirtió en seres pletóricos en nostalgia de aquel pretérito inolvidable
de pasadas generaciones, que convirtieron cientos de horas en un paréntesis. Es
un hecho que traza un antes y un después en el desenvolvimiento cultural,
artístico y social de Santa Cruz de La Palma. Se desvaneció la incertidumbre de
cuándo se abrían las puertas y con ciento cincuenta mil vatios de luz se
iluminó el escenario polivalente en su nueva etapa con la tecnología más
avanzada.
Los acordes
musicales cubrían los poros de los rehabilitados y restaurados muros,
centinelas incansables de cómo los sensibles oídos de centenares de asistentes
al acto inaugural presenciaban el magnífico espectáculo. La ocasión fue única y
grandilocuente con la orquesta constituida especialmente con ese fin, contando
con prestigiosos maestros. La interpretación de “San Borondón, poema sinfónico
de una isa”, música y creación poética de Luis Cobiella Cuevas (1927) y Luis
Ortega Abraham (1948), y otras piezas dio el comienzo de una larga andadura y
así llenar el vacío escénico de contenido. El objetivo debe fortalecer una
amplia y variopinta oferta, que se ofrecía en el Teatro Chico.
Su alma volvía de
nuevo a estar vigente y las candilejas lucían su magia con un excelente
PROGRAMA:
Primera
parte:
MEMORIAS
Y CANCIONES. Música de Luis Cobiella interpretada por Candelaria González
(soprano), Orlando Niz (tenor) e Inmaculada Marrero (pianista) de acuerdo con
el siguiente guión:
Gracias
a la Morenita. Soprano, tenor y piano.
Letra: Luis Cobiella.
Décimas
del mal amor. Soprano y piano. Letra: Luis Ortega.
Pasa
el mártir. Tenor y piano. Letra: Manuel Verdugo.
Nana
para dormir la pregunta de Tchaikowski. Soprano, tenor y piano.
Letra: Luis Cobiella.
Laura
y dos canciones románticas, a la memoria de Elías Santos y Manuel Henríquez. Soprano, tenor y
piano. Letra: Luis Cobiella.
Segunda
parte:
SAN
BORONDÓN, POEMA SINFÓNICO DESDE UNA ISA. De Luis Cobiella sobre
letras de Luis Ortega. Interpretado por: Candelaria González (soprano), Orlando
Niz (tenor), Inmaculada Marrero (pianista), Coro Polifónico de la Universidad
de La Laguna dirigido por Alfonso López Raymond, y la orTCM, bajo la dirección
de Ángel Camacho Bermúdez.
I
Marcha de desterrados. Coro y orquesta.
II
Interludio por seguidillas. Orquesta.
III
Relaciones-Breve Sirinoque-Relaciones. Orquesta.
IV
Canción del mar:
1.
Mi mar es tal cual
parece. Tenor, coro, madera y cuerda.
2.
Enemigo, compañero. Soprano, coro y
orquesta.
3.
De voluble
transparencia. Tenor, coro y piano.
4.
Mercenario del
solano. Soprano, coro, madera y cuerda.
5.
Añilado y opalino. Tenor, madera y
cuerda.
6.
Una bacanal romana. Coro, metal y
cuerda.
7.
El rumboso mar
indiano. Tenor, coro, metal, piano y cuerda.
8.
Hondo, largo y
arbolado. Soprano, tenor y orquesta.
9.
Mi mar es tal cual
parece. Solistas, coro y orquesta.
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