De ahí el nombre por el que fue conocida. En dos escrituras
públicas del XIX figura como calle Huerta, 1810 y 1845, por la familia de este
apellido que tuvo su domicilio en la arteria urbana y poseyó tres fincas en la
misma.
Pedro Poggio Álvarez (1863-1929), diputado en Cortes y orador
sobresaliente, que logró obras decisivas para La Palma. Se dio a conocer en las
veladas públicas de la Academia de Jurisprudencia.
Realizó sus estudios en el Colegio de Segunda Enseñanza Santa
Catalina, continuando en el Instituto General y Técnico de San Cristóbal de La
Laguna (Tenerife).
Cursó la carrera de Derecho y se doctoró en la Universidad
Central de Madrid, ingresando seguidamente en el Cuerpo de Archiveros,
Bibliotecarios y Arqueólogos.
Gracias a su gestión, se continuó decisivamente con la
carretera general del Sur, la instalación del faro de Fuencaliente, con la
ampliación del Puerto y la creación del museo de Bellas Artes capitalino.
Fue distinguido con varias condecoraciones, entre las que
destacan la de Caballero de la Real y Distinguida Orden de Carlos III y la de
Isabel I de Castilla, la Reina Católica. El Excmo. Cabildo de La Palma le honró
nombrándole Hijo Predilecto en 1912.
A continuación, hacemos hincapié a la actividad industrial
desarrollada en los primeros números impares de sus breves aledaños, hasta
mediado de la pasada centuria.
La vitalidad y genio de Juan Cabrera Martín (1838-1916),
célebre comerciante en el ámbito comercial isleño, dice uno de sus muchos
biógrafos, se han manifestado en el terreno industrial, como propietario de la
fábrica de tabacos la Africana, a la altura del nº 5, vivienda donde nació
Poggio Álvarez.
La producción iba en aumento. A cuatro grandes certámenes de
la industria había concurrido y en los mismos mereció la alta atención y
significación de los jurados calificadores, demostrando así la razón y justicia
con que los fumadores agotan la existencia de tan importante fábrica de
tabacos, cigarrillos y picaduras.
En la Exposición Hispano-francesa de Zaragoza, de 1908,
obtuvo Medalla de Oro; en el Concurso de la Cámara Agrícola de Santa Cruz de
Tenerife, en 1900, un primer premio; en la Universal de Bruselas, Mención
Honorífica y en la Nacional de Valencia, Medalla de Oro. Mucho más podríamos
añadir a este apartado. Otras plumas lo podrán hacer, no lo pongo en duda, pero
mi objetivo no ha sido sino escribir un bosquejo biográfico. El hombre lo
merece por los hechos, durante su larga vida, generosamente llevó a cabo.
Ha sido la primera adquisición de un inmueble en este rincón
urbano con nombre para su rehabilitación. Se trata de una Casa Doméstica
Burguesa o Señorial del XIX, casa canaria en la que predomina la madera de tea
en puertas, ventanas, pavimentos y estructuras de cubierta, y en la que durante
la rehabilitación se ha respetado al máximo su fisonomía y consecuentemente la
identidad de nuestra Arquitectura Canaria.
Su edificación se realizó por Pedro Díaz del Castillo,
utilizándose originalmente como casa y posteriormente como de uso público,
instalándose en ella los juzgados y Correos. Fue adquirida por el Colegio
Oficial de Aparejadores y Arquitectos Técnicos en 1988, para destinarla a sede
colegial y Delegación en la isla de La Palma.
Las reformas se ejecutaron conforme a cuidadosos criterios de
alta calidad, en cuanto al valor y antigüedad de la vivienda. En definitiva, se
trata de un patrimonio significativo a base de los materiales habituales en
nuestra tradición, piedra, barro, madera y cal. Finalizada la obra, fue
inaugurada la sede colegial de La Palma, el 21 de marzo de 1999.
FUENTES CONSULTADAS:
-Jaime Pérez García (1930-2009). Excronista oficial de Santa Cruz
de La Palma.
-Jesús Manuel Lorenzo Arrocha (1955). Santa Cruz de La Palma.
- Colegio Oficial de
Aparejadores y Arquitectos Técnicos e Ingenieros de Edificación de Santa Cruz
de Tenerife. Sede La Palma.
No hay comentarios:
Publicar un comentario