Quién es quién en el callejero de nuestra ciudad amante de
destacar lo más relevante de personajes, instituciones y hechos históricos, que
lucharon por el municipio, brillaron en sus áreas respectivas o simplemente
fueron vecinos humildes, que por su generosidad merecieron la memoria con sus
nombres y apellidos de Santa Cruz de La Palma. Hacemos un recorrido para
ponerle caracteres a esos cientos de denominaciones.
No tenemos ninguna calle que haga referencia a su benefactor
y fundador, Henry Dunant (1828-1910), Premio Nóbel de la Paz en 1901, que tomó
la iniciativa de ayudar a los demás con el lema: “Todos somos hermanos”, pero
sí en homenaje a la Cruz Roja, donde se ubica su obra benéfica, sede local e
insular de la organización, prestando un servicio altruista a quienes lo
necesitan.
Es normal que al pasar por sus inmediaciones, al lado de la
ermita de San José, nos damos cuenta de su presencia por ver aparcadas las
ambulancias. Ofrezco mis respetos al interés dado a hechos y personas, auxilio
al necesitado en distintos rincones. Movimiento humano más cerca de los
habitantes isleños.
Simplemente enunciamos algunas pinceladas, que nos indican el
alcance de su labor solidaria, como los más de treinta años trabajando con los
refugiados, voluntariados, acciones a favor de los colectivos más vulnerables,
en contra de los abusos de los derechos humanos, medio ambiente, lucha contra la discriminación racial, defensa de
las minorías étnicas, cooperación con los países más desfavorecidos del
planeta. En definitiva, es actuar conforme al compromiso contraído con la
sociedad mundial.
Lo importante es un mensaje al sentimiento de unidad basado
en metas o intereses comunes, aplicando lo que se considera bueno. Se
conviertan en lazos sociales, que unen a los miembros de una comunidad entre
sí. Un corazón abierto con flujos de amor y comprensión engrandece al hombre y
mujer, desafiando un pulso a las adversidades.
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